Nací en Guadalajara cuando más frío hacía: un 12 de enero. Ya son ganas de fastidiar; con lo calentito que se estaba dentro…
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Me licencié en Humanidades y en Periodismo; mi primer trabajo «serio» fue como periodista radiofónica. Me decepcionó.
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Viví en Estados Unidos, en Madrid, en Toledo, en Valladolid, y ahora vivo en León. Ya solo me falta mudarme a un lugar al lado del mar. Espero conseguirlo.
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Me gusta cuidar mi alimentación, pero si me invitas a un hornazo salmantino estoy dispuesta a negar que dije esto.
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Mi primera palabra pronunciada fue «papel», o al menos eso me dijeron. ¿Será que ahí ya se estaba despertando mi pasión por la escritura? Va a ser que sí.
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Soy optimista y positiva. Lo tendrás difícil si pretendes verme enfadada. No voy a hacerlo ni aunque me digas que no te gustan mis textos.
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Me encantan los deportes de raqueta; da igual el que sea, pero tiene que haber algo con lo que azotarle a la pelota.
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Tengo perro y trato de aprender de él todo lo que puedo.
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Cálamo Digital es mi primer negocio especializado en contenidos.
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Fui investigadora en Historia Medieval, guía de exposiciones de Arte, redactora de catálogos de comunicación corporativa, responsable de comunicación digital, correctora, editora y traductora. Buff, ¿me queda algo más o ya lo probé todo?
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Leer es mi afición favorita. Qué raro, ¿no?
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Prefiero comer que cocinar. Y ya puestos a comer, que sea una tortilla de patatas sin cebolla, cualquier queso del planeta, o unas «almóndigas», que dicen los castizos.
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La frase que más me hizo reír en los últimos años la pronunció un futbolista alemán: «el fútbol es como el ajedrez, pero sin dados»
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Siempre he querido tocar el piano. Las teclas, me refiero, porque lo que se dice tocar tocar, alguno ya toqué. Pero bueno; me consuela saber que aunque no aprendí a tocar el piano, al menos creé un canal en youtube sobre música y comunicación. ¿Quieres verlo?